miércoles, 27 de octubre de 2010

martes, 12 de octubre de 2010

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La Televisión… Radiografía del País

Los medios de comunicación masiva y su contenido, especialmente, son el reflejo de las necesidades e intereses de las audiencias a las que pretenden llegar.

Lamentablemente en el Ecuador las emisoras de televisión, no hacen sino desnudar de una manera patética las carencias de la sociedad de este país. No tengo idea de cómo haya sido antes de 1990 la televisión en el país, pero en la última década del siglo XX no la recuerdo tan mala como en la primera y de lo poco que llevamos de la segunda de este siglo.

Recuerdo sobre todo el periodo 90-95 como una época en la que se consumían muchos "enlatados" importados de los EEUU e incluso programas del prime time americano que resultaban bastante entretenidos y sobre todo que no violentaban la inteligencia de los espectadores (no tanto al menos) y tenían una muy buena calidad. En cuanto a la producción nacional destaco enormemente los primeros pasitos (que recuerdo yo) de la Comedia Situacional con "Mis Adorables Entenados", que era sin duda alguna una gran apuesta por el humor basado en la cotidianeidad y con contenidos sociológicos interesantes que intentaba (y lo conseguía) caricaturizar a la familia de clase baja o media baja de la costa ecuatoriana sin caer en el uso desmedido y descontrolado de la vulgaridad y el humor idiota y fácil. Este fue el tiempo también en el que la telenovela y el cine como industria nacional hicieron su intento por consolidarse; Novelas de afamados autores ecuatorianos como Juan León Mera con Cumandá o Luis A. Martínez con "A la Costa"" fueron llevadas a la televisión con poco éxito pero el intento valió para el despegue de la industria fílmica en el país. Por su parte El Ángel de Piedra y El Segundo Enemigo (si bien son de 1988 y 1989 respectivamente) marcaron un debut glamoroso y bien trabajado de la Telenovela Ecuatoriana. Con la dirección de Cesar Carmigniani, el colombiano Julio Jiménez y Carl West (Los Sangurimas 1992) la Telenovela en Ecuador parecía haber despegado y que no haría sino mejorar y perfeccionarse en años siguientes.

En los siguientes años 96-99 continúan las producciones telenovelisticas nacionales pero no registran los mismos niveles de popularidad debido al decaimiento notorio de su calidad y la fuerte competencia de la telenovela extranjera, sobre todo desde Brasil, Colombia, Venezuela y México (que llegaban cada una por su temática y calidad individual a los diversos niveles de la audiencia). Es destacable de estos últimos años del siglo el nacimiento de la Comedia de Skit (Sketch) con programas como Ni en Vivo Ni en Directo (1996 TC) que era un programa que en sus orígenes utilizaba el ridículo y el absurdo para hacer comedia transgresiva con elementos como la imitación, el redubbing (montaje de voces y sonidos) y la parodia política.

Es a partir del 2000 y por la infame influencia comercial del inmenso público (y potencial mercado) de la región costa del país (sobre todo de Guayaquil) cuando comienza el deterioro constante y marcado de la producción televisiva nacional, no recuerdo un programa de ningún tipo que valga la pena, salvo aquellos que han mantenido una larga trayectoria haciendo periodismo de investigación, tanto la comedia como la telenovela regresaron a saltos agigantados sobre sus primeros pasos exitosos y retrocedieron kilómetros en materia de calidad.

En los últimos años y hasta el sol de hoy basura televisiva como La Pareja Feliz, El Cholito y Rosita, la Taxista que son producciones nacionales (Guayaquileñas en realidad) con pésimos niveles de calidad tanto técnica como escénica, los guiones son malos, los actores son malos, los argumentos son malos… (todo esto para un público aun peor)… Estos atentados para la inteligencia de los ecuatorianos ocupan casi toda la malla de AAA, el Prime Time nacional, y que, supongo por el horario que ocupan y la cantidad de publicidad que se pauta en ellos, mantienen niveles asombrosos de audiencia. ¿Cuan deprimente resulta esto para una sociedad como la ecuatoriana? ¡Seguramente poco, como mucho!

No es de asombrarse que sea una región y en este caso básicamente una ciudad la que condicione de esta manera la calidad de gran parte de los programas de televisión ya que Guayaquil es al Ecuador lo que Venezuela a América Latina, cuna del chavacanerismo, la vulgaridad y la rusticidad en temas creativos y artísticos al punto de que cadenas de alcance nacional han dividido su oferta en dos, una para la mayoría del país y otra dedicada exclusivamente para Guayaquil y su zona de influencia.

¿Soluciones?... un buen libro, buena música o si son adictos al televisor como yo pues DirecTV o cualquier otro servicio de televisión por suscripción o el ideal pero casi inaplicable: Guayaquil Independiente!!!!